El consorcio de ReIMAGIN ahondará en la hibridación de tecnologías de fabricación para sectores altamente competitivos como el de automoción, aeronáutica, el sector energético o el de la máquina herramienta.
La evolución de las tecnologías de fabricación y de las herramientas de diseño permiten la aplicación de nuevos materiales en la fabricación de componentes de mayor complejidad y sofisticación, favoreciendo el desarrollo de nuevas prácticas de diseño y de fabricación multi-materiales y multi-funcionales.
Los procesos de fabricación tradicionales (como la fundición, la forja, la estampación, el HIP y sus diferentes formas de unión) cuentan con un alto nivel de complejidad y, sin embargo, siguen siendo ampliamente utilizados para la fabricación de componentes metálicos. A estos procesos se les suma la fabricación aditiva, cada vez con un mayor peso, puesto que presenta importantes ventajas en cuanto a la posibilidad de desarrollo de nuevos diseños aligerados, personalización de productos, reparación o integración de funcionalidades.
Siguiendo la exitosa colaboración en el seno de anteriores esfuerzos investigadores, el equipo del proyecto ReIMAGIN seguirá ahondando en los trabajos de hibridación de tecnologías de fabricación, aprovechando las múltiples ventajas de cada una de ellas, unidas a las de la fabricación aditiva. Con ello buscan proporcionar soluciones para aplicaciones concretas de gran interés para sectores altamente competitivos, como el de automoción, aeronáutica, energía y máquina-herramienta, en diversas líneas estratégicas de trabajo como son el aligeramiento de peso, la mejora de la conductividad eléctrica, la conducción de calor, la resistencia a la corrosión, la resistencia al impacto o al desgaste, entre otras.
Como apunta la Doctora Ana Fernández, investigadora de AZTERLAN, “en el seno del proyecto IMAGINE ya conseguimos demostrar que es posible fabricar componentes mono-material a partir de la hibridación de dos tecnologías diferentes, sin que los puntos de unión entre las zonas fabricadas con las diferentes tecnologías fuesen un punto débil o crítico del componente. Pudimos observar también que mediante la hibridación de estas tecnologías conseguimos componentes con las mismas propiedades metalúrgicas en ambos segmentos. Por tanto, cuando definimos la agenda de investigación de esta nueva y ambiciosa propuesta de trabajo, partimos de una base extraordinariamente sólida, sobre la que seguir construyendo e innovando”.
De este modo, entre los nuevos objetivos que el equipo de trabajo persigue destacan algunos como el diseño de nuevos materiales con composiciones ad-hoc en forma de polvos atomizados, el desarrollo de componentes multi-material mediante tecnologías aditivas (LMD, EHLA), la optimización de procesos de soldadura de materiales “especiales” (FSW, WAAM, solid bonding), o el desarrollo de tratamientos térmicos para piezas fabricadas mediante tecnologías hibridadas.
Además, ReIMAGIN busca también integrar nuevos retos como son la digitalización y la sostenibilidad de los procesos. “Por un lado, queremos incrementar la digitalización en los procesos híbridos desarrollados en base a nuevos modelos de simulación de comportamiento funcional, o de predicción de microestructuras. Paralelamente, trabajaremos también en el desarrollo de actuaciones concretas dirigidas a facilitar la retención de valor del producto, su reciclado y su impacto ambiental, así como en la eficiencia energética del proceso”.
El consorcio de ReIMAGIN está formado por 8 socios, los Centros Tecnológicos miembros del BRTA AZTERLAN, CEIT, LORTEK y TEKNIKER; las universidades UPV/EHU, MU; y las unidades empresariales I+D FCIE y EIPC, con capacidades complementarias entre sí y referentes en el ámbito de fabricación avanzada de la CAPV en procesos y productos de transformación de metales y está financiado por el programa Elkartek del Gobierno Vasco.
Componente mono-material desarrollado mediante tecnologías hibridadas (HidroSolidificación + Fabricación Aditiva) en el seno del proyecto IMAGINE.
